#BLACKLIVESMATTER

BALDWIN: The police in this country make no distinction between a Black Panther or a black lawyer or my brother or me. The cops aren’t going to ask me my name before they pull the trigger. I’m part of this society and I’m in exactly the same situation as anybody else — any other black person — in it. If I don’t know that, then I’m fairly self-deluded… What I’m trying to get at is the question of responsibility. I didn’t drop the bomb [that killed four black school girls in Birmingham]. And I never lynched anybody. Yet I am responsible not for what has happened but for what can happen.

EL SER 2 DE HITCHCOCK

De Alfred Hitchcock se dice que era misógino y extremadamente cruel con sus actrices (rubias). Y, sin embargo, fue capaz de reconocer a quien tenía junto a él, su esposa Alma Reville, como aquella persona que le hizo florecer y, sobre todo SER, en este discurso de agradecimiento por el American Film Institution Achievement Award en 1979.

RECORDAR A LOS MUERTOS

Era 31 de diciembre. Me dirigí a la biblioteca de mi barrio, pues había recibido un mensaje; les había llegado un libro que había pedido. Al buscar el ejemplar en el estante de libros reservados, topé con un nombre en uno de los lomos que acompañaban a mi libro: Enrique de Hériz. Y de repente entendí que trascender la muerte con el arte es una manera de vivir. Era el último día del año y Enrique, a quien tanto queríamos quienes le conocíamos, pues era sumamente cariñoso con los demás, y quien nos había dejado hacía apenas unos meses, volvía a estar presente, e insistía, a su modo, en pervivir en la voluntad del lector que había escogido Historia del desorden para empezar el año. Y sonreí, porque Enrique seguiría entre nosotros en este 2020 que acaba de empezar.