jueves, 17 de enero de 2013

LOS BUENOS TEXTOS BIEN RECITADOS


Adreça desconeguda es un buen texto al que Homar y Fernández se agarran (sin mucho tesón, eso sí) para desprenderse de él de manera pausada, como saben hacerlo sólo los grandes, con una dicción clara, dando importancia a lo que se dice y no a lo que se hace.

Me gusta el tipo de teatro que vi ayer donde prima el texto sobre la puesta en escena, que es más bien desnuda. Porque un buen texto y unos buenos actores necesitan poco más que eso, la presencia y las palabras.

Sin embargo, sí faltó un poco de compromiso en la jugada, en la implicación de ambos. No sé si fue debido a que la de ayer era la noche del estreno, o que el proceso de ensayo y montaje de la obra ha sido escaso, pero dio la sensación que ambos, si bien grandes, porque lo son (y por poco que ofrezcan el espectador recibe mucho), estuvieron a medio gas, sin darlo todo.

Luego están los detalles, las tonterías de profesional, el hecho de que uno hubiera hecho otra propuesta, si bien siguiendo esa idea minimalista (me gustó la idea de la lámpara que empieza en lo alto iluminándolo todo para acabar rozando el suelo y dejando la escena en la penumbra. Es un movimiento el de la lámpara que recuerda a las obras de Peter Brook, su lentitud extrema consigue que el espectador no se dé cuenta de que se mueve hasta el final, que sí percibe entonces el cambio de luz y de lugar. Me gustaron las dos sillas, pero podría haberse quedado en esas dos sillas, sin la alfombra, sin las galletas, ni la presentación de las galletas, ni la mandarina que se come Fernández casi al final de la obra).

En todo caso, es un must, cualquier amante del teatro debe ir a ver a estos dos monstruos escénicos para darse cuenta de lo que significa la desenvoltura encima de un escenario; sobre todo, cuando ese talento va ligado a un texto que sorprende gratamente, como el de Kressman.

lunes, 14 de enero de 2013

EL OPTIMISMO


El optimismo significa tener una fuerte expectativa de que, en general, las cosas irán bien a pesar de los contratiempos. Por eso suelo sonreír, para que los contratiempos sepan que no les temo.

jueves, 10 de enero de 2013

MI AMOR DE 75 AÑOS


Hay actores ya en la vejez, como Omar Shariff, que siempre te quitarán la respiración. Eso me pasa con José Sacristán, que está estupendo a sus 75 años y a puntito quizá de ganar su primer Goya, un premio que no necesita para que le reconozcamos su talento y aportación a nuestro cine.

miércoles, 9 de enero de 2013

LOS HUÉRFANOS


Esta foto de Finbarr O'Reilly de la agencia Reuters es de unos niños en un orfanato del Congo.

Lamentablemente, estos últimos días la noticia del descenso de las adopciones internacionales a causa de los impedimentos que ponen ya muchos países copa los diarios. Quienes pierden son los niños. Adoptar, en cualquier parte, debería ser más fácil. Porque siempre será mejor que un niño duerma en una cama y goce de un/os padre/s que lo quiera/n a que lo haga en una caja, y solo.

A los treinta y tres años empecé un proceso de adopción que se detuvo y, con él, uno de mis sueños y, probablemente, también el sueño de muchos de esos niños.

IT'S A BOY!


Y eso me recuerda a una de las canciones de uno de los primeros musicales que vi, en Londres... Tommy de The Who, que me impresionó sobremanera (tanto la historia como la puesta en escena; ¡yo hasta entonces no había visto escenarios que se movieran!), como lo hizo la actuación del maravilloso Jim Broadbent. Un lujo de iniciación.